El motivo por el que unas plantas tienen flores y otras no es principalmente su modo de reproducción.
El reino vegetal se reproduce de dos maneras diferentes: mediante reproducción sexual, en la que intervienen las flores y las semillas, o mediante reproducción asexual, en la que actúan otras partes de la planta. Aunque hay alguna especias que combinan reproducción sexual y asexual.
Reproducción de las plantas con flores
Las plantas con flores se reproducen mediante las semillas que se crean dentro de estas. Las flores tienen órganos sexuales femeninos y masculinos, y en ocasiones ambos en la misma planta, aunque no siempre.
Para reproducirse, es necesario que el polen que fabrican los órganos masculinos llegue a los femeninos y allí crear las semillas.
Incluso en el caso de las plantas que cuentan con órganos masculinos y femeninos, es raro que se lleve la polinización en la misma planta, por lo que es necesario que el polen viaje. Pero como las plantas no se pueden mover, son los insectos como las abejas o las mariposas, las que ayudan con esta función. También el viento esparce el polen de manera que se extienda y llegue a otras plantas.
Las 5 plantas con flores más conocidas
En la naturaleza existen infinidad de especies de plantas con flores. Las hay en todo tipo de climas y se extienden a lo largo y ancho del planeta. Estas son algunas de las más comunes que puedes utilizar para decorar tu casa o tu jardín, y que podrás cultivar sin excesivos cuidados.
Geranios:
Son una de las plantas más populares en nuestro país. Existen más de 400 variedades de esta planta, y los vistosos y variados colores de sus flores es una de las razones por las que están presentes en tantos balcones y jardines españoles.
Necesitan mínimo seis horas de sol, pero es muy fácil saber si tienen el suficiente, ya que si no es así, no florecerán. El riego no es necesario llevarlo a cabo más de dos veces a la semana en verano, y una en invierno.
Además, es conveniente añadir un fertilizante. En el mercado se puede encontrar alguno específico para esta especie. Aunque lo mejor es seguir las especificaciones de cada fabricante, lo más habitual es utilizarlo cada cuatro o seis semanas durante el periodo de floración.
Margaritas:
Es una de las plantas más abundantes en todo el mundo. Existen numerosos especias, y las características comunes de todas ellas es que son resistentes y se adaptan muy bien al medio.
A la hora de cuidarlas necesitan mucha luz, por lo que es conveniente plantarlas en el exterior. Si preferimos que estén dentro de casa, lo mejor es colocarlas cerca de una ventana.
En cuanto al riego, el exceso de agua no las conviene, por lo que con regarlas cada dos o tres días es suficiente. Ten mucho cuidado con no encharcarlas, ya que se pudrirán las raíces y morirán.
Adelfa:
No requieren muchos cuidados, y tienen una flor muy bonita y olorosa. Pero hay que tener mucho cuidado si te decides a plantarla, ya que es una especie muy venenosa. De hecho, a la hora de manipularla, es recomendable que lo hagas con guantes y no dejarla nunca al alcance de niños o mascotas.
Para su cuidado, no es necesario dedicarle mucho tiempo: aguanta bien la sequía y el viento, por lo que solo es necesario regarla cada quince días cuando está creciendo.
Eso sí, ten en cuenta que es una planta de exterior, no se adapta bien a entornos interiores ya que necesita bastante luz para su correcto crecimiento
Crisantemos:
Son otra planta con un gran número de especies en las que varía notablemente la forma de sus flores de una a otra.
Esta planta necesita mucha luz, pero no debe estar expuesta directamente a los rayos del sol, ya que podría quemar las flores. Es conveniente además que se mantenga en una habitación bien ventilada y es importante regarla continuamente, pero con poca agua para que no se llegue a encharcar.
En España es una flor muy popular para depositar a los pies de las tumbas, y se vende sobre todo en fechas como el día de Todos los Santos.
Rosas:
El cuidado de estas plantas es un poco más delicado que el de las demás, pero aun así se adaptan muy bien a las temperaturas de nuestro país, lo que junto con la belleza de sus flores y su penetrante y agradable aroma, las hacen muy populares.
Sus cuidados dependen bastante de la especie que tengamos, pero en general, es conveniente regarlas habitualmente, pero con poca cantidad de agua. Lo que sí es importante es que tengas cuidado con las plagas que las atacan, principalmente el pulgón.